Fidel Rodríguez Ramos

  Desde 1982 resulta difícil saber el pensamiento, principios de  quienes un día fueron importantes partidos políticos, así por ejemplo sabíamos que el Revolucionario Institucional presumía de ser la encarnación del movimiento de 1910, y lo demostraba, pues en un momento recupera setenta millones de hectáreas para los campesinos.

  Al PAN se le tenía admiración por su decidida lucha para ganar espacios de dirección frente al gobierno, en presidencias, gubernaturas, diputaciones, muchas veces triunfa y se le despoja de lo que obtiene con heroicas jornadas. Todo eso queda en felices recuerdos, pues de pronto tales institutos se convierten en mortales enemigos del pueblo mexicano. Quizás el gobierno más peligroso del siglo XX es el que dirige Carlos Salinas de Gortari, a quien debemos la casi  destrucción total del país.

   En el gobierno continúa Ernesto Zedillo, con él se continúa una línea violenta para gobernar, hasta hoy un crimen de indígenas en Chiapas, más de noventa, sigue sin ser aclarado, elementos paramilitares preparados por el ejército acribillan a mujeres embarazadas, niños, adultos, ancianos que oraban por la paz.

  La violencia, el terror se implementa para paralizar a la sociedad, mientras una minoría aprovecha el desconcierto para apropiarse de valiosos recursos naturales, empresas que se consideraban propiedades de la nación,  se concentran en pocas manos de nacionales y extranjeros. Lo más valioso, el mercado interno se entrega al poderío norteamericano, la minería a Canadá. Zedillo por ejemplo entrega el goce de gran parte del sistema ferroviario, durante cien años a una compañía gringa; que a su vez lo traspasa a canadienses.

  Durante el gobierno de Vicente Fox toda el agua se entrega a refresqueras, compañías mineras. Y lo más criticable se aprueba el actuar de grupos dedicados al narcotráfico, a ellos se les permite empezar a crear un gobierno paralelo en todo el país. Fox no tenía una mente brillante para tal proyecto, éste se delinea, traza por los Estados Unidos de América; México se sujeta a las órdenes presidenciales del norte, que ven en el comercio de drogas una poderosa fuente de control social, político e ingresos. La sumisión foxista se muestra cuando George W. Bush desde Guanajuato declara la guerra a Irak.

  La cereza del pastel es Felipe Calderón Hinojosa, lo que todo Michoacán sabía, desde el 2006 hasta el 2012 su gobierno y el de Fox estaban dirigidos por el narcotráfico; a más ferocidad, letalidad correspondía más saqueo, robo en todos los órdenes, como a los maestros a quienes se les amenaza, INCONSTITUCIONALMENTE, con arrebatarles sus empleo, por medio de un examen amañado; mientras los mentores cuidaban de no perder su empleo, Calderón oferta la posibilidad en España para que empresarios gachupines incursionen en Comisión Federal de Electricidad (CFE), PEMEX, en la construcción de autopistas, hospitales, servicio de alumbrado, agua potable en varios municipios y entidades, su servilismo le es muy bien compensado pues al terminar su mandato es contratado en la empresa de energía Iberdrola.

   Esos dos gobiernos, por lo menos hoy se sabe, estuvieron al servicio del narco, recibiendo altos sobornos. Más violencia se tradujo en permisos a Inglaterra para que explotara el litio, ésta nación inteligentemente se desprende de esa concesión, lucra, la vende a China. Así lo creemos, con Obrador se da apenas el primer paso para, otra vez, tratar de recuperar el destino de esta desdichada nación, de que siga así después del 2024 depende de tod@s.

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