Alicia R. Ramírez
Millones de gentes en el planeta, no creen en los efectos peligrosos que causa el fumar tabaco,
una planta que logra domesticarse en México hace miles de años, seguramente tenía aplicaciones
medicinales para heridas, como ungüento, que se han perdido, sólo las antiguas crónicas nos dicen
que los grandes sacerdotes le inhalaban en pipas, en forma de pelotillas se arrojaba al fuego, pues
creían que el humo era alimento de los dioses, formaban nubes que hacían posible la lluvia.
En el planeta se registra a mil trescientos millones de consumidores, cada año fallecen por males
al corazón, cáncer de pulmón ocho millones de personas, impacta ver en una placa de rayos equis
las pequeñas perforaciones, círculos que poco a poco se van formando en esos órganos tan
importantes que nos permiten tomar el oxígeno de las plantas y océanos, ignorábamos que el
tabaco también produce la mortal diabetes. Debido a ello se ha declarado al 31 de mayo como
“Día mundial sin tabaco”.
Tan peligroso es el consumo, que hasta la televisión, el cine, la prensa, la radio en gran parte ha
preferido no difundir la antigua propaganda que les dejaba miles de millones de pesos en
ganancias, entendieron que era más redituable, más mejor no seguir aconsejando el fumar, como
supuesta forma para sentir una falsa seguridad, madurez o éxito. Desafortunadamente cada vez
más su consumo, empieza desde temprana edad, a los once años, de ahí, aunque no se respete, la
prohibición de venderlo a menores de edad.
El periodista Ciro Gómez Leiva acaba de mencionar que en el 2022, se dejaron de surtir en el
sistema de salud público de México, quince millones de recetas y, pues como se van a dar los
medicamentos, si cuesta mucho atender los males que causa el tabaco. Sumamente difícil es dejar
ese vicio, una afición, dependencia a raíz de la llamada nicotina, droga que encadena hasta la
muerte. Las compañías tabacaleras no aceptan renunciar a las millonarias ganancias, de ahí que
promuevan nuevos productos, cigarrillos con “sabor” a sandía, fresa, cereza, uva a los cuales se
han aficionado cada vez más nuestros adolescentes.
Otro novedoso producto son los llamados vapeadores, usados por muchos chamacos desde hace
cinco años, creyendo que realmente no son nocivos. Hace años, comprobamos en la región del
lago que era posible, con la colaboración de todas y todos, evitar su consumo en el transporte
público, en las salas de cine, en los restaurants, escuelas, bibliotecas, la obra parecía imposible de
lograr. Les invitamos desde este espacio a vivir más días, evitando el consumo de este producto
nocivo para la salud y la economía de los fumadores inocentes, desinformados.
