Aurora López Nambo
Tzintzutzan, Mich., 08 de febrero del 2020.- De acuerdo con los datos históricos, se dice que la imagen del Señor del Rescate, venerada en el templo del ex convento franciscano de Santa Ana liberó al pueblo en el siglo XVIII de la peste de viruela negra.
La historia señala que fue en el siglo XVIII cuando en esta región azotó la temible peste de la viruela en la cual se perdieron muchas vidas y era tanta la preocupación de la gente de la localidad que un guardián del convento franciscano acudió a los pies del cuadro que ya se encontraba dentro del convento franciscano y suplicó ayudase a todos los habitantes de este municipio infectados por este terrible enfermedad exclamando: “¡Padre mío santísimo, rescátanos del poder de la muerte, por esa tu sangre derramada!”.
Entonces el milagro ocurrió y la peste se fue alejando de las comunidades indígenas. Días después la peste desapareció por completo dejando al pueblo completamente agradecido con la Bendita Imagen que desde ese entonces ya ocupa un lugar especial en el Templo de San Francisco de Asís.
La imagen del Señor del Rescate es un lienzo al óleo del siglo XVI, de la colección de Arte Colonial que se ubicaba dentro del Ex Convento Franciscano de Santa Ana, es una presentación del Nazareno aprendido por los soldados y a un lado la madre sufriendo el martirio al ver a su hijo.
La fiesta del Señor del Rescate en Tzintzuntzan, es una de las festividades en Michoacán con más tradición y se realiza cada año ocho días antes del Martes de Carnaval; reúne a miles de personas que acuden de toda la región y el estado, ya sea caminando, en peregrinaciones ciclistas, o bien en vehículo.
En esta ocasión a raíz de la pandemia que se vive por el nuevo coronavirus Covid-19, la fiesta que tendría lugar este martes 9 de febrero ha sido suspendida y únicamente habrá misa concelebrada y una procesión con la imagen por las calles del pueblo, pero sin la compañía de feligreses.