LA POLITICA EN PATZCUARO
Armando Martínez
Mientras más cerca está la fecha del proceso electoral del mes de junio, donde se habrán de elegir, en el caso de Michoacán, al gobernador, a diputados locales y federales, así como a presidentes municipales, más interesante se torna la elección en este municipio del pueblo mágico de Pátzcuaro, sobre todo, por la manera en que se están eligiendo a los posibles candidatos a puestos de elección popular y por la manera que está haciendo, está provocando desbandada en algunos institutos políticos, principalmente en el antes invencible PRI.
Como se sabe, la elección de la candidata a la presidencia municipal de la coalición PRI-PAN-PRD, causó revuelo, no solo al interior del tricolor, sino también con los de la propia coalición, ya que no esperaban un cambio muy drástico en la elección y tomando en cuenta que el PRI era quien encabezara la coalición y que debería ser mujer, al decir de los dueños del partido, por lo que esa decisión del género hizo que se registraran por lo menos cinco damas priistas y tras una serie de “exámenes” y otros requisitos, se fueron eliminando algunas de las aspirantes por “no haber pasado la prueba” y la única que la pasó fue la inminente candidata, Denia Montaño Torres, quien no era muy activa dentro del partido, pero que al decir de los mismos priistas, tiene “padrinos” de gran peso y eso le valió la nominación como candidata. La anterior decisión, provocó que el aspirante más serio y peligroso para los otros partidos, Julio Arreola Vázquez, quien hizo trabajo por varios años, hace unos días renunciara al PRI de “sus amores” y después de una invitación y analizarla cuidadosamente, aceptara para encabezar la candidatura a la presidencia municipal por el partido Fuerza por México y de paso arrastrar a su proyecto a más priistas inconformes.
De la misma manera, Erika Dionicio Velázquez, quien también se registró como aspirante a la candidatura, renunció al PRI denunciando serias inconsistencias en la elección y fue más drástica al señalar a la virtual candidata, de no tener ningún conocimiento de lo que es la política, mucho menos para llevar el rumbo del municipio en caso de ganar la elección de junio, ya que solo tiene la preparatoria y algunos cursos académicos de belleza y nada más. Mientras que ella (Erika), tiene licenciatura en Derecho y varios cursos de política y aun así “reprobé el examen para ser tomada en cuenta en la candidatura”, lo que la hizo renunciar al PRI y se espera que más priistas hagan lo mismo y así seguir cavando su tumba.
Pero también en Morena de López Obrador se cuecen habas, ya que la también virtual candidata por el Partido Encuentro Solidario (PES), Hermila Solís Calderón, se retiró de Morena donde militó algún tiempo, por la manera en que se estaban dando las cosas. Hace algunos meses dio a conocer sus aspiraciones para ser candidata a la diputación local por Morena y después para buscar la presidencia municipal, pero se retiró del partido de Morena y se fue en busca de otras oportunidades, las cuales encontró en el PES.
Quienes van viento en popa, son los aspirantes a la presidencia municipal por Movimiento Ciudadano y del Verde Ecologista, Alfredo Mejía y Enrique Karrum, respectivamente, donde nadie les hace sombra, con la diferencia de que el también comunicador Enrique Karrum, le lleva bastante ventaja a Mejía en cuestión de trabajo. Cabe recordar, que Alfredo Mejía ya participó en dos elecciones pasadas al cargo de edil municipal por el PAN si éxito alguno y va por la tercera por Movimiento Ciudadano y con el milagro de que a ver si es la vencida.
Mientras que el candidato de Morena a la alcaldía, aun no se define y pudiera ser hasta la próxima semana que se dé a conocer “el bueno”, después de las “encuestas” que se llevan a cabo, pero donde también se teme que las encuestas estén de más y quienes decidan al candidato sean “los de arriba” y los favoritos y que llevan la delantera en dichas encuestas se queden como el chinito y la candidatura está entre Rachid Gonzales Parra, Hugo Reyes Barriga, Antonio Mendoza Torres y Salvador Rodríguez.