Fidel Rodríguez Ramos
Hay la idea de que el lugar que poseía en la Estación de los Ferrocarriles en Pátzcuaro, el general Lázaro Cárdenas del Río, su quinta “Eréndira”, se construye sobre la base de un centro de adoración prehispánico, su vista hacia el lago es espectacular, éste edificio lo ofrece para que en 1951 funcione el CREFAL (Centro Regional de Educación Fundamental para la América Latina), con la ayuda de la OEA (Organización de los Estados Americanos), UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) y el gobierno de México.
Miles de maestros de Cuba, Haití, Chile, Argentina, Ecuador, Brasil, Perú, El Salvador, Nicaragua, Uruguay se prepararon en este centro internacional patzcuarenses, realizando sus prácticas de campo en las comunidades, tenencias, municipios del entonces bellísimo lago. Al terminar sus cursos, regresaban a sus países de origen para propiciar en sus lugares un desarrollo económico, político y cultural.
La fiesta de inauguración es en la plaza de San Francisco, con las danzas michoacanas por excelencia, como los Curpites, Viejitos, Panaderas, Negritos, Soldaditos, Apaches bajo los acordes de las bandas musicales de Tingambato, Ajuno, Zirahuén, San Juan Tumbio y Pichátaro. Confeti, arreglos multicolores, chuspata, uinumu, corredizos de gusanillo dieron la bienvenida a representantes oficiales, al primer director Lucas Ortiz Benítez. Los hijos de varios conductores del CREFAL, conocen, estudian en las escuelas de Pátzcuaro, al compartir con nosotros las aulas.
La presencia cultural del instituto fue contundente en la región, con sus maestros como Alfredo Mendoza Gutiérrez que crea una escuela inolvidable de teatro, conocida por sus excelentes obras en muchas partes, labor que no le fue desconocida a Ignacio López Tarso.
El auditorio “Naciones Unidas”, se convierte en un club de cine de arte, durante años. En el escenario de excelencia para presentar bailes regionales, grupos de ballet como el de la escuela secundaria Moisés Saénz de Tingambato. Ahí el grupo de Los Sonor´s presenta sus primeros conciertos. La Camerata de la Casa del Lago de la UNAM interpreta las Cuatro Estaciones de Vivaldi; el ensamble de música andina de la preparatoria Carrillo Puerto, múltiples veces cierra la clausura de generaciones exitosas.
Pero quizás lo más contundente fue su biblioteca, llena de miles de obras, donde estuvieron grandes investigadores, filósofos, científicos sociales, antropólogos como Bradley A. Levinson que escribe una monografía de la escuela secundaria “Lázaro Cárdenas del Río”. Novedad era su fonoteca con todos los clásicos que se prestan a domicilio; su colección de filminas de obras de arte universal, del museo de Antropología e Historia. Al visitar algunos estados, los maestros al ver los libros que portábamos del centro nos comentaban que sabían de su existencia. Ahí escuchamos a Arnoldo Córdoba, que colabora con nuestros modestos semanarios. Escuchamos a Héctor Díaz Polanco invitado por la comunidad indígena de Santa Fe de la Laguna.
¿Qué no nos regaló el CREFAL? Lo poquito que somos muchos, lo logramos gracias a ese centro generoso. Me comentan que en el aniversario se acostumbraba a las seis de la mañana, iniciarlo con Las Mañanitas al son de la tambora, después se ofrece un desayuno, seguido de un acto central donde se reconocen los años de servicio del personal. La suerte quiso que hiciéramos en el 2001 una breve reseña en sus cincuenta aniversarios, aún estaba con nosotros don Ricardo Urrieta, don Arturo, don Luquitas el excelente fotógrafo, que al jubilarse se desempeña como un confiable conductor, poco a poco varios se nos van adelantando, sin embargo, están en nuestro pensamiento, mientras existamos. Como olvidar a un ángel como Alicia Gómez que conocimos a los cinco años de edad.
Como olvidar el nueve de mayo, recordando que públicamente en 1990, el CREFAL por medio de su director Mario Aguilera Dorantes mostró su solidaridad ante uno de los más graves problemas que ha tenido la Tenencia de Ibarra.
¡Felicidades a todas y todos los que forman ese digno centro!