Fidel Rodríguez Ramos
Muchos maestros, desde hace veinte años, nos opusimos a un proyecto presidencial, que entregaba toda la responsabilidad a los Estados del país, para ofrecer educación en todos los niveles, básico, medio superior y superior. De pronto la protesta disminuye, pues el gobierno federal asegura que todo el dinero que para la misma manejaba, se entregaría a los gobernadores, la trampa se tiende, al principio la oferta parece razonable, en Michoacán el gobernador atendía las escuelas normales, pero pronto Lázaro Cárdenas Batel en un anuncio oficial declara que mientras se pudiera, cuando hubiera dinero se daría empleo a los egresados normalistas.
En ese comunicado aparece un apartado que muchos no atendieron, había una cláusula que decía más o menos así: “En el caso de no haber recursos económicos el gobierno estatal, se abstendría de dar plazas”. Además, se daba entrada a particulares, empresarios para fortalecer, mejorar la enseñanza, gracias a la entrega de recursos y dinero. Pronto se ve como aumenta la desigualdad, pues los estados más pobres como Chiapas, Guerrero, Oaxaca y Michoacán tenía pocos recursos para mejorarla; pero lo más grave, al no contar ya con más dinero se abstuvo de dar plazas a más docentes, muchas escuelas, sobre todo en el medio rural se desatendieron. Esto se ve también en la Universidad Michoacana, Tecnológico por falta de recursos para más maestros, edificios, miles de chamacos quedan fuera por no “pasar” un criticable examen, que realiza, cobra una empresa privada, violando la autonomía de esos centros.
La otra cara de la moneda, Sonora, Nuevo León, Ciudad de México reportan mejores resultados en la enseñanza por ser entidades más ricas. Se llega el caso de que Tabasco, gracias al petróleo puede darse el lujo de crear una nueva universidad. La demanda por más estudio, maestros no puede resolverse en Michoacán, Guerrero y Zacatecas sus gobernadores anunciaron su decisión de regresar nuevamente la responsabilidad de atender a la escuela al gobierno federal.
Para amarrar más esa propuesta, que provoca más desigualdad, injusticia todos los partidos políticos con su aprobación dan nacimiento a un engendro letal llamado Unidad del Sistema para la Carrera de las Maestras y Maestros (USICAMM), que ilegalmente realiza las funciones que constitucionalmente se reservan a la Secretaría de Educación Pública (SEP), como es contratar profesores; dar aumentos salariales, ascensos utilizando exámenes o evaluaciones, que inexplicablemente pocos o nadie pasa. Ya en ello no tienen que ver absolutamente nada los sindicatos, quienes controlan al Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE), estuvieron de acuerdo con esas medidas sin tomar en cuenta a la base que supuestamente representan.
Al ver la efectividad que hubo en Michoacán con un gremio altamente politizado y combativo, que por desgracia se fracciona, ahora el ensayo se promueve con las comunidades indígenas, con el anzuelo de que al ser autónomas, independientes podrán manejar la partida presupuestal que le corresponde para atender la educación, salud, servicios, quizás por ello el gobierno estatal ni se preocupa por atender la creciente extinción del lago de Pátzcuaro, no lo hace porque supone que ahora con el dinero que maneja Janitzio puede empezar a detener esa muerte que al parecer es inevitable.