María Lupita R. Rosas
Las esperanzas del PRI, PAN y PRD, poco a poco se han estado viniendo abajo, en saco roto
cayeron los buenos comentarios de destacados articulistas, comentaristas de los medios de
difusión, hacia la figura de la arquitecta Xóchitl Gálvez, recordamos lo que menciona en alguna
ocasión Ciro Gómez Leyva: “sólo un milagro hará que gane”. Innegable, la señora en un inicio
causa un buen impacto, por sus audaces pronunciamientos, como aquél donde declara que
seguramente no es mujer, pues le parece que tiene demasiados testículos.
Sus ocurrencias, dichos han dejado de funcionar, se rompe la ilusión de muchos que creían ver en
ella a una persona mínimamente educada, gracias a que estudia en la UNAM, pero al preparar un
informe para previamente, poder titularse como ingeniera en computación, plagia información sin
preocuparse de dar créditos al verdadero autor. Ante ese descubrimiento dice: la “pendejíe” un
poquito. Un medio comenta que el encargado del PRI, el secretario, ya está pensando en relevarla
por Beatriz Paredes, pues al paso de los días, sus comentarios sin sustento, han provocado la
desconfianza de millones de personas, que en un inicio se sintieron atraídos, como antes muchos
lo hicieron con Vicente Fox.
Últimamente declara que fue tibia la posición de la Presidencia de la República, ante el conflicto
de Palestina e Israel, pues ingenuamente dice que Hamás no representa a los palestinos. Muestra
desconocimiento de ese conflicto, al cual la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en 1982,
acuerda un resolutivo donde reconoce a Palestina, el derecho de recurrir a todos los medios para
liberarse del dominio israelí, inclusive al de las armas. Seguramente ni hoy sabe de las protestas en
Washington, Colombia, Nueva York, Francia, Inglaterra contra Israel por ese nuevo genocidio.
Asombra cuando hace pocas horas, dice que antes “estábamos” mejor con el PRI y PAN, cosa
imposible de demostrar, pues quienes si estaban a todo dar, y lo siguen estando son los
banqueros, a quienes en 28 años les hemos regalado un billón 200 mil millones de pesos, para que
se recuperen de sus grandes pérdidas. Los dueños extranjeros de bancos en México, en ese
tiempo han ganado dos billones de pesos. A Banamex Calderón, Peña Nieto le perdonaron 15 mil
848 millones de impuestos.