Fidel Rodríguez Ramos

   Los que más han dañado la educación pública, hoy continúan ofendiéndola, desacreditando, tras presentar los últimos resultados que obtuvieron nuestros chamacos, tras practicar la llamada prueba PISA, compitiendo con sus iguales, en edad, de EUA, Canadá, Corea y otros muchos más países que no tuvieron entre las filas de la enseñanza a una Elba Esther Gordillo Morales, quien durante más de veinte años, además de dirigir a los maestros para que votaran por el PRI o PAN, daña seriamente el quehacer educativo, vendiendo plazas, corrompiendo a líderes sindicales, promoviendo favores sexuales, para las mujeres que desearan ingresar, ganar más, cambiarse de lugar de trabajo, ascensos en la SEP.

 Hoy critican la enseñanza, los aprovechamientos de los niños en matemáticas, español, física, cuidando de no mencionar como millones de alumnos llegan diariamente a las escuelas sin ningún alimento en el estómago. Como no vamos a tener pésimos resultados si desde hace tiempo, en la Secretaría de Educación Pública (SEP), al frente, no ha estado un verdadero maestro, comprometido con la promoción de la lectura, la investigación, la elaboración de libros dignos, bien hechos y, o preocuparse por la verdadera actualización de los docentes.

  Fox, Salinas de Gortari, Peña Nieto, Calderón, Zedillo a la de a fuerzas nos hicieron entrar en la Organización de Comercio y Desarrollo Económico (OCDE), con la finalidad de denigrar el quehacer de los maestros en escuela donde prácticamente no hay nada, para garantizar una verdadera labor educativa, pues los padres son los que deben cargar con la mayor parte de los gastos, desde construir, dar mantenimiento a las escuelas. Sabiendo eso, admiten cada año que la OCDE obligue a nuestros chamacos, en igualdad de edad, a competir con sus pares de Dinamarca, EUA, Canadá, Inglaterra, Corea, Sudáfrica y muchos países desarrollados donde no hay la corrupción, saqueo que existe en México cotidianamente.

  Claro, tras las pruebas obtenemos los peores lugares, acusando a los maestros, a las normales públicas, rurales de ser los verdaderos responsables de la pésima educación. Hoy los trabajadores de la enseñanza ni siquiera tienen una real representación sindical que los defienda, tan sólo en Michoacán hay como doce derivaciones de lo que una vez fue el poderoso SNTE. Claudio X González quien está detrás de Xóchitl Gálvez, José Ángel Gurría que será el encargado de hacer el programa de gobierno de la ingeniera, la Gordillo, Emilio Chuayfett fue la pandilla que promueve nuestra inclusión en la OCDE. Con el deseo de que definitivamente el Estado se desentienda de la educación, dando dinero para hacer posible la misma a comités de padres de familia, organizaciones religiosas, empresariales, civiles que decidirán, quién ingresa, quien es expulsado, quien merece ascensos o más retribución económica, como ya sucede en muchas escuelas “chárter” gringas. No se midieron los críticos, pues además evidenciaron también el pobre trabajo, que creen ellos, se realiza en los colegios privados. Entre muchas cosas, que buenos resultados iban a tener después de haber perdido por el COVID-19 más de dos años. No haber hecho nada, para regularizarlos, fue un verdadero crimen. (RRF) 

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