Fidel Rodríguez Ramos
México, por el actual momento delicado que vivimos, no se merece el que su vida pública,
política, esté sembrada de rumores, suposiciones que no permiten acercarnos a la realidad de
asuntos que desafortunadamente nos afectan. Deseamos la práctica de la democracia, hemos
realizado enormes sacrificios, se han burlado de nuestras ideas, acciones por creer en ella, en la
necesidad de que verdaderamente, haya un libre juego para elegir a representantes que
verdaderamente resuelvan los anhelos populares, el que ya no haya violencia, cierre de las
escuelas superiores para impedir el acceso de nuestros hijos a ellas; trabajos donde mínimamente
se den los más necesarios derechos; viviendas accesibles, justicia; atención médica.
La democracia implica la práctica de la verdad, no en difundir medias verdades o mentiras. Ahora
nos dicen que hace poco el PRI y PAN, en secreto, sellaron un pacto para entregar la Ciudad de
México, la candidatura a la Presidencia de la República al PAN, de ser cierto eso, jugaron con las
personas de Beatriz Paredes y un hijo del expresidente Miguel de la Madrid, no se vale rebajar la
dignidad de ellos, haciéndoles partícipes de un engaño.
Los poderosos quizás promueven la siembra de mentiras, suposiciones para que millones de
personas no acepten involucrase en los asuntos, donde de alguna manera hemos sido
continuamente robados, Ernesto Zedillo con el cuento de salvar a los ahorradores en la banca que
era nacional, accede arreglar una quiebra bancaria con la ayuda de Vicente Fox y Felipe Calderón,
sembraron el rumor de que era para bien de todos, ocultando que quienes verdaderamente se
beneficiaron fueron los entonces dueños de los bancos, que se autoprestaron miles de millones de
pesos, el estrago fue tan contundente, que ese daño, acabaremos de pagarlos todos y todas hasta
el 2070.
Igual se ha sembrado el rumor de que Rosario Robles fue una expresa política, encerrada tres
años, para que regresara siete mil millones de pesos. No se sabe, son rumores lo que hace la
empresa brasileña Odebrecht para comprar la voluntad de Enrique Peña Nieto, a su encargado de
Pemex; al PAN para que le permitieran hacer obras en esa empresa, a cambio de dinero que dan
para que ganara la presidencia Peña Nieto y realizará una reforma energética que abre las puertas
a empresarios de España, Estados Unidos de América, Italia y Canadá. Quienes manejan a México
para su beneficio propio, consideran que el pueblo es un infante, sin la capacidad para entender lo
que se planea en las altas esferas, de ahí su gusto por sembrar rumores; Xóchitl Gálvez debe
demostrarnos su acerto, denuncia de que Claudia Sheimbaum recibe “moches”, treinta millones
de pesos para su campaña, de no hacerlo así, será otra sembradora de mentiras para seguir
confundiendo.