Alejandro Martínez Castañeda
El Balance Social Cooperativo (BSCoop) “es una herramienta de la gestión socioeconómica que
facilita a las cooperativas medirse y rendir cuentas, a los/as asociados/as —sus dueños/as—
especialmente, y a todos los demás grupos de interés que son impactados por su accionar en
relación con el cumplimiento de su esencia o identidad, es decir, desde los valores y los principios
cooperativos. Además de permitir el análisis interno de cada cooperativa, este caudal de
información ayuda a construir la imagen del movimiento cooperativo sobre parámetros objetivos
y fiables”, según la Alianza Cooperativa Internacional (ACI).
Los especialistas argentinos Liliana Fernández, Lorenzo Norma Geba, Verónica Lilián y Montes
Rosa Schaposnik recuerdan que la necesidad de brindar información social en las cooperativas
surge de su propia naturaleza, fundada en valores y principios. La ACI ha señalado que “es capital
desarrollar un sólido sistema de comunicaciones dentro del movimiento de manera que los
diversos sectores se comprendan y apoyen mutuamente, ya que así se alcanzará una mayor
unidad ideológica”.
La educación es esencial a todos los niveles y es de suma importancia que el movimiento
cooperativista invierta en la promoción de la imagen cooperativa y que explique al mundo la
diferencia cooperativa, que se basa en sus principios y valores cooperativos. En ese sentido, el
BSCoop contribuye al logro de los objetivos señalados por la ACI, y constituye un instrumento
idóneo en el camino de ofrecer información social en forma sistemática y comparable.
La presentación periódica y sistemática de dicho balance, a través de un modelo de contenidos
mínimos común a todas las cooperativas, resulta de gran utilidad por lo siguiente:
• Permite la autoevaluación por parte de las cooperativas
• Pone de manifiesto la evolución operada en la cooperativa a través del tiempo
• Facilita la comparación entre distintas cooperativas
• Evita que se manipule la información
• Ofrece información socioeconómica homogénea.
Los autores argentinos mencionados refieren que el balance social de las cooperativas habrá de
estar referido a:
• Los principios cooperativos: en cuanto a su realización conforme con indicadores precisos que se
determinen para cada uno de ellos; y
• Presupuesto social: cumplimiento del programa trazado por las cooperativas en relación con sus
particulares circunstancias de personal, asociados, otras cooperativas y comunidad en general, con
indicadores singularizados para cada caso.
Apuntan que, para la elaboración de un modelo de balance social, se parte de la hipótesis de que
los Principios Cooperativos constituyen un marco común de referencia para evaluar, a través de su
cumplimiento, la responsabilidad social asumida y ejercida por las cooperativas resaltando su
propia identidad.
En resumen, BSCoop es un instrumento para detectar los grados de aproximación o de
alejamiento en relación a la misión como organización cooperativa buscando medir el impacto de
la cooperativa en su entorno; identificar oportunidades de mejora en su accionar; y evaluar la
comunicación que tiene la cooperativa y el modelo cooperativo como instrumento de desarrollo
socioeconómico en las comunidades.