Cuando se inaugura el aeropuerto Felipe Ángeles, los empresarios externaron sus críticas, le
califican como algo inútil, un derroche de dinero, pero se cuidaron de olvidar como todo el pueblo
de México, les salva en dos ocasiones las aerolíneas que les entregan para que ganaran mucho
dinero: Mexicana de Aviación que Gastón Azcárraga truena, sufriendo el despido ocho mil
trabajadores, se beneficia con más de mil millones de dólares, huye a Nueva York y Peña Nieto
suspende una orden de aprehensión en su contra, la otra empresa fue Aeroméxico.
En La Jornada y diario Milenio dos especialistas en economía, no se han cansado de repetir que
México puede desarrollarse invirtiendo más dinero en todo, pero nunca dicen de dónde podría
agarrarse, debido a que a los grandes inversionistas, desde hace décadas se les perdona el cobro
de impuestos o simplemente se les devuelve los poquitos que entregan. La bolsa de valores no los
paga, quienes hacen posible eso es la Suprema Corte de Justicia. Igual lo hacen las compañías
mineras, de un treinta por ciento que deben entregar de sus ganancias no pagan ni el cinco por
ciento, eso sí cuando se les exige que paguen más, amenazan con irse a otros países, como si se
pudieran llevarse en maletas Zacatecas, Guerrero, Sonora y Michoacán.
Más burla les merece la nueva refinería Olmeca, dicen que ésta es un barril sin fondo, por el
mucho dinero que se le arroja, pero no dicen su enojo que les produce cuando se les acaba el
negocio de importar millones de litros de combustibles, por eso en cuarenta años no se construye
ninguna refinería.
Pero ¿quién se ha beneficiado con los mares de petróleo?, no ha sido el pueblo, sino una minoría
mega enriquecida, los gobiernos no la molestaba en los pagos de impuestos, al contrario, les
ayudaban para salir de sus problemas gracias a la exportación de los hidrocarburos que muchas
veces, por el bajo precio, se regalaban. México es uno de los países de la Organización de
Comercio y Desarrollo Económico (OCDE), que menos impuestos obtiene, pues sólo los amolados
los pagan, no así el dueño de Elektra y Coppel que se niega a pagar más de 50 mil millones de
pesos. Como para no creer el PRI, PAN y PRD pegan el grito en el cielo, cuando saben que por la
deuda externa, que nos heredaron, pagaremos en el 2025, más de un billón trescientos mil
millones de pesos. (RF)